Cosmética del enemigo

Por Fabián D´Amico

Cosmétique de l'ennemi (Cosmética del enemigo) es una novela de Amélie Nothomb que causo furor en Francia en 2001, año de su publicación. Adaptada por Patricio Orozco y en el Camarín de las musas puede verse una versión teatral de la historia.

Jerome Angust enta a la sala de espera de un aeropuerto y escucha el anuncio que su vuelo sufre un retraso. Se dispone a leer un diario para atenuar el tedio de la demora cuando un extraño personaje llamado Textor Texel, comienza a darle conversación a pesar de su resistencia al dialogo.
Jerome se ve sometido ante su interlocutor sin poder hacer nada para evitar que este extrovertido y extraño ser lo acose verbalmente .Textor se encarga de demostrarle que la única violación a la cual el ser humano no puede ponerle resistencia es la auditiva.

El extenso monólogo de Texel, que tanto la víctima como la platea escuchan cada vez con más atención e intriga, está plagado de citas sobre violación, tortura y asesinatos que pondrán a Jerome frente a un espejo que tal vez no quiera ver.

El relato que empieza plagado de humor y sarcasmo con diálogos certeros y filosos entre los protagonistas,se transforma en una intriga casi policial. La maestría de la autora saca a los espectadores de la comodidad de la butaca y los lleva a ocupar el borde de la misma esperando con tensión el desenlace sorpresivo e inquietante de la historia, donde se demuestra que nada es lo que parece ser.

Patricio Orozco como adaptador y director de la obra privilegio la tensión y el dramatismo antes que el humor presente en el texto. Logra crear climas intensos que potencian el misterio que se plantea promediando la obra y que resuelve de manera precisa en un vibrante desenlace.

Las actuaciones de Gonzalo Jordán y Florencio Laborda son efectivas aunque dispares. Jordán en el rol de Jerome, crea una criatura gris que va cambiando a lo largo de la historia, con muchos matices donde hay un excelente trabajo de dirección en cuanto a la violencia contendía de este personaje. En cambio el rol de Textor está creado desde la superficialidad. La apariencia entre divertida y diabólica de Laborda y su buen manejo físico no logran disimular la linealidad de la construcción de un personaje complejo, concebido desde la exterioridad y sin inflexiones.

“Cosmética del enemigo” es un texto contundente por el dramatismo del relato y la manera innovadora de hacerlo, el cual Orozco plasma en una puesta dinámica y sólida.